Espectáculos

Adam Sandler intenta tocar el solo del “Stairway to Heaven” de Led Zeppelin con cómicos resultados

Adam Sandler se lanzó a tocar “Stairway to Heaven” durante un episodio de Conan

El encierro está sirviendo para que mucha gente reconecte con su músico intenrior, esto es así tanto para los ciudadanos de a pie como para las grandes estrellas de Hollywood. O si no, que se lo digan al actor Adam Sandler, que intentó -sin mucho éxito- tocar el solo del clásico “Stairway to Heaven” de Led Zeppelin en un reciente episodio de Conan, uno de los talk shows más populares de Estados Unidos. 

Esta improvisación del show de Conan O’Brien se realizó de manera telemática a medias entre la casa del actor y del presentador, que se encuentran confinados en sus respectivos domicilios a causa de la expansión del COVID-19. 

“He estado practicando en mi cuarto“, le dijo Sandler al presentador después de tocar algo de blues improvisado junto a él (minuto 16 del vídeo). “Esto es todo lo que he sacado”, dijo después de intentar tocar el solo de Jimmy Page con algo de torpeza. Depués, ambos empezaron a debatir sobre la letra de la canción, más concretamente de la parte que dice “And as we wind on down the road“. Para Sandler, el tema dice “And every wino down the road“, mientras que O’Brien interpreta, también de manera errónea, que la letra reza “And there’s a line on down the road”. Parece que a ambos les hace falta escuchar un poco más de Led Zeppelin. 

Esta no ha sido la única aparición musical de Sandler en los últimos días, ya que también cogió la guitarra para tocar una canción que había compuesto sobre el coronavirus en el show de Jimmy Fallon. Por desgracia, el actor no se sabía la letra de memoria, así que se puso unas gafas de sol para que la genten o le viera “mirando tando a sus notas”. No cabe duda de que el músico es un apasionado de la guitarra y que, pese a no ser un virtuoso, domina sus principios.

Esta pasión por la guitarra no es casual. El actor decidió comenzar a aprender más como manera de combatir el pánico escénico. “Me ponía nervioso siempre“, contó el año pasado. “Entonces salía al escenario y no me acordaba de lo que tenía que decir, me quedaba en blanco. Tenía la guitarra en mis manos, así que, al menos, hacía algo“. Su guitarra se acabó convirtiendo en su red de seguridad.